Las películas espectralmente selectivas son una tecnología avanzada de láminas para ventanas diseñada para bloquear selectivamente ciertas longitudes de onda de la luz solar, en particular el calor (infrarrojo) y los rayos UV, permitiendo el paso de la mayor parte de la luz visible. El material final es un poliéster producido con más de 100 capas nanométricas de PET.
A diferencia de las películas tradicionales (oscuras o espejadas), que reflejan o absorben todos los componentes de la luz de forma más uniforme, las películas espectralmente selectivas: Bloquean hasta el 97 % de los rayos infrarrojos (es decir, el calor), con un rendimiento final de aproximadamente el 60 %. Filtran más del 99 % de los rayos UV, que causan decoloración de los muebles y daños en la piel. Deja pasar hasta un 60-70 % de la luz visible, manteniendo el ambiente luminoso y natural.
Máximo confort térmico sin obstruir la vista ni el entorno. Apariencia prácticamente invisible: ideal para escaparates, viviendas de lujo o edificios protegidos. Mayor eficiencia energética, tanto en verano (refrigeración) como en invierno (algunos modelos también presentan baja emisividad). Sin efecto espejo evidente, a diferencia de las películas reflectantes.
El control solar ronda el 60 %, mientras que con las películas de espejo incluso supera el 80 % de energía solar rechazada. Son productos tecnológicamente muy avanzados y, por ello, más caros que las películas clásicas de espejo con base metálica. No crean un efecto de privacidad ni eliminan el deslumbramiento solar.
Edificios prestigiosos o históricos, donde la estética es fundamental. Oficinas y residencias que buscan reducir el calor sin oscurecer los interiores. Museos o salas de exposición, para proteger objetos fotosensibles.
Las películas de selección espectral son una solución tecnológicamente avanzada para quienes buscan la máxima comodidad, eficiencia energética y transparencia estética.
